miércoles, 1 de enero de 2014

Capítulo 9

Louis.
Estaba caminando junto a Zayn y a Liam cuando oímos a Niall pedir auxilio a Harry.


- Harry ayuda.

Después oímos su cuerpo chocar contra el suelo. Rápidamente me di la vuelta y vi como Niall se caía. Acudí allí mientras los dos amigos que me acompañaban hacían lo mismo.

- ¡Niall! ¡Niall! - grité para ver si reaccionaba pero al ver que no pasaba nada tuve que verme obligado a darle varias tortas. Nada. No había respuesta alguna.

Llamamos al número de emergencias. En pocos minutos vino una ambulancia para llevarse a nuestro amigo, al no poder acompañarle todos Liam fue con él.
No teníamos nada que hacer. Niall se encontraba inconsciente y no conocíamos a nadie en Londres, ¿o sí?

- Harry -llamé al de rulos.
- ¿Qué pasa?
- Podrías... llamar a Anne. A lo mejor ella sabe qué hacer, conocen Londres y, no sé, había pensado que nos podrían ayudar.
- Lou, ojalá pudiera hacer eso como quien llama a una amiga. No me quiero aprovechar de la situación. Lo mejor será que vayamos al concierto, y, a la salida contarlas lo ocurrido.


Harry tenía razón así que sin más demora, asentí con la cabeza dando a entender que aprobaba la idea. Nos dirigimos al McDonald's, aunque sin mucho apetito.


Narrador.
La hora antes al concierto llegó. Todos se encontraban ya en la cola para entrar al estadio cuando Zayn recibió una llamada.


- Liam... Sí... Pero, ¿ahora?... Claro... No hay problema... Adiós.

Zayn les contó toda la información que Liam le había dado. Niall había despertado después de varias horas. El médico había pedido que por favor fuera alguien mayor de edad para poder dar de alta a Niall. Louis era el único que podía hacer eso ahora.

Aunque no fuera de su agrado tuvieron que dirigirse al hospital.  
Una vez allí esperaron a que fuera la hora de terminar el concierto. Harry llamó a Anne. Ellas se preocuparon y fueron allí en seguida.


Sophie.
Cuando Anne me comentó la cosa tan importante por la que habían interrumpido nuestra ducha y cambio de vestuario, me estremecí. Era mi culpa. Todo era mi culpa. Si yo no hubiera pedido el número de Niall, él no se habría desmayado.


- Abbie, Bridget, Holly, nos vamos al hospital. Emergencia.

Empezaron a preguntarme un montón de cosas, pero yo estaba centrada en cambiarme lo más rápido posible y salir disparada hacia allí. Nada más llegar nos encontramos a Harry y otro chico ayudar a Niall andar hacia un coche. La verdad era que temía acercarme, no vaya a ser que le de otro chungo.

- Chicas ¿podéis hablar con el resto? Me gustaría poder tranquilizar a Niall. No me gustaría que cada vez que le hable tengamos que ir al hospital.
- Claro - respondió Abbie. - A decir verdad, el morenito ese tiene un buen cuerpo. Y los tatuajes le hacen verse realmente bien.
- Abbie - dijo Holly - recuerda no presionar al chico. Que luego le agobias.


Fueron todas hacia el resto mientras yo me acercaba a donde se encontraba el rubio. Mandé a los dos chicos que se encontraban a su lado que se fueran. Me senté en un banco e hice una seña con la mano para que él me entendiera y fuera directo al sitio que estaba a mi lado.


Abbie.
Fuimos andando al coche. Me había fijado bastante en el chico de tez morena. Pude oír que se llamaba Zayn. Hum, Zayn, nombre sexy, como él. Tenía unas facciones perfectas.  Ojos oscuros y almendra, pestañas largas, podrían captar la atención de cualquier chica. El pelo era algo más corto por los lados, eso le daba un aspecto de chico malo, me gusta. Podía ver unos tatuajes por su brazo, aunque no había muchos, los que estaban eran bastante bonitos, nunca me gustaron los tatuajes.



Sophie.
Me quedé hablando con Niall. Podía notar que cada vez se le mezclaban menos las palabras, o no movía tanto las manos, pero seguía mirando al suelo, evitando el contacto visual. No podía aguantar esa situación, me incomodaba mucho tener que hablar con alguien al que no podía casi ni tocar o sufriría un ataque al corazón.


- Niall, ¿te apetece comer algo?
- Sí, claro. Desde esta mañana apenas he comido.
- No se hable más. -Me levanté de mi sitio y fui a hablar al resto. Parecían estar hablando tranquilamente. - Chicos, Niall y yo vamos a comer algo. Por si no os dabais cuenta, el pobre lleva sin comer mucho. Anne id a mi casa, todos, sí vosotras también. Toma, las llaves, en cuenta cojamos algo en KFC vamos para allá. Adiós.


Sin dar tiempo a que pudiera quejarse el resto, cogí a Niall por el abrazo y tiré de él hasta llevarlo a mi coche. Subimos y conduje hasta el restaurante de pollo más delicioso del mundo, Kentucky Fried Chicken. Ordenamos un cubo grande de alitas de pollo. Tenía 16 alas y cuatro paquetes de patatas, pero dado el hambre del concierto podría comerme una vaca entera.

No quería que nadie me reconociera así que volvimos rápidamente al coche. Le invité a pasar a la parte trasera. Tenía un coche de 7 plazas, con los cristales de atrás tintados para más privacidad. Las ventajas de la fama eran eternas, y en este caso agradecí millones de veces el tener una pequeña mesita plegable en el maletero, aunque no sé que hacia ahí. Estuvimos comiendo y hablando un buen rato, no quería volver ya a casa, este chico tenía algo que le hacía diferente al resto, y ahora que lo había conseguido amansar y podíamos tener una conversación cara a cara sin sudar, ni temblar, no quería volver.


Holly.
Estábamos en casa de Sophie esperando a que volvieran de comer pollo. La situación era algo incómoda. Liam, Zayn y Louis estaban sentados en un sofá, y Abbie, Bridget y yo en otro. Harry y Anne habían bajado a la bodega a por algo. No sabía el qué. Claro, con esto de que ya habían hablado nos dejaban a nosotros el marrón de comernos el mal royo que había en el salón. Aunque pronto terminó eso.


- Chicos, fiesta.

Habían subido por las escaleras los dos con una botella de Vodka y gominolas. Esto se iba a animar en seguida. Ya tenía ganas de una vez por todas de poder disfrutar algo que no tuviera que ver con mi trabajo.
Y pronto estuvimos todos bebiendo, bailando y cantando por toda la casa, la enorme casa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario